Un corazón endurecido
El hijo que vive como esclavo
Los dos hijos de la parábola de Jesús del hijo pródigo no podrían haber sido más distintos. El hijo mayor trabajaba incansablemente en los campos por el bien de la familia. El hijo menor tomó su parte de la herencia familiar y la gastó en “una vida desenfrenada” (Lucas 15, 13). Sin embargo tanto el hijo mayor como el menor tenían el mismo problema: No habían comprendido las inmensas bendiciones que provenían de ser hijos de su padre y vivir en la casa del padre.
En distintos momentos de tu vida, puedes haberte identificado con cualquiera de los dos hijos, ¡ese es el ingenio de esta parábola! En este...
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