Rut decidió que acompañaría a su suegra a Belén. “¡Que el Señor me castigue con toda dureza si me separo de ti, a menos que sea por la muerte!” (Rut 1, 17), le dijo a Noemí. Y a pesar de haber podido quedarse en su tierra, con sus padres y casarse de nuevo ahí, emprendió el viaje para convertirse en la persona que Dios quería que ella fuera.

Rut encontró trabajo en los campos de Booz, un pariente de su difunto esposo y finalmente se casó con él. Booz y Rut tuvieron un hijo a quien pusieron por nombre Obed. A su vez, Obed fue padre de Jesé quien fue el padre del rey David. Rut tomó una decisión por medio de la cual se convirtió en una parte activa del plan de Dios, pues como bien sabemos, el Mesías desciende del rey David.

Un viaje con el padre Mike Schmitz. Durante este mes, leeremos al padre Mike Schmitz, que es capellán en la Universidad de Minnesota en Duluth. El padre Mike nos dice que el Espíritu Santo desea guiarnos en las decisiones que tomamos, tanto en las grandes como en las pequeñas. En el primer artículo (página 4), veremos cómo aún las pequeñas decisiones pueden ayudarnos a convertirnos en discípulos heroicos. En el segundo artículo (página 10), nos exhorta a confiar en el Señor aun cuando parezca que él permanece en silencio. Y en el tercer artículo (página 16), nos muestra cómo Dios nos bendice solamente por “aparecer”, por estar donde él quiere que estemos cada día.

Quiero animarlos a que lean estos artículos con atención y que mediten en cada uno de ellos. Y que el Espíritu Santo los guíe en las cientos (o miles) de decisiones que toman a lo largo de su vida.

En la sección de atrás encontrarán dos artículos que confío serán de mucha bendición para ustedes. El primero es sobre el evangelista San Marcos y las razones que lo llevaron a escribir el primer Evangelio. El segundo tiene que ver precisamente con una decisión que ha impactado la vida de muchas personas.

Pido al Padre celestial que ilumine el corazón de cada uno de ustedes y que les dé la gracia para abrir su corazón y recibir su Espíritu Santo.

María Vargas
Directora Editorial