Nuestra Señora de Guadalupe, ruega por nosotros
Una madre que nos cuida a todos
En el hogar de mi infancia había un icono de la Virgen María, cuyos ojos parecían seguirme dondequiera que yo fuera. Mi abuela me decía en broma que la Virgen siempre me estaba mirando, así que era mejor que me portara bien.
En la escuela católica, las maestras insistían en que María era perfecta en todo sentido porque fue concebida sin pecado, pero al contemplar...
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