Junio 2017
Carta del Editor
Por: Luis Quezada
Queridos hermanos en Cristo:
El domingo 4 de junio celebramos este año la Solemnidad de Pentecostés, vale decir, aquella memorable y gloriosa ocasión en que los apóstoles reunidos con la Virgen María y otros discípulos en el Aposento Alto experimentaron el derramamiento generoso y avasallador del Espíritu Santo. Tal fue el poder espiritual que los llenó que salieron con valor y decisión a proclamar que Jesucristo había resucitado, que todo lo que él había enseñado era cierto y verdadero y que ahora el Señor estaba sentado a la diestra del Padre en la gloria del cielo.
Este acontecimiento, naturalmente, marcó el nacimiento de la Iglesia cristiana, el nuevo Pueblo de Dios, cuya Cabeza es Cristo mismo. Así fue como el Espíritu Santo llegó a la vida de todos los fieles creyentes en Cristo que se arrepentían de sus pecados y se hacían bautizar en el nombre del Padre, y del Hijo y del Espíritu Santo, según las instrucciones del Señor. Así comenzaba la transformación del género humano.
Pero esto, que sucedió hace más de 2.000 años, no fue el único acontecimiento de esa naturaleza. En los Hechos de los Apóstoles, vemos que lo mismo se repitió varias veces. En realidad, el Espíritu Santo ha estado actuando en la vida de los fieles cristianos en forma ininterrumpida a través de los siglos, lo cual es evidente en la continuidad de la Iglesia Católica y los muchísimos frutos de santidad que ha generado.
Uno de esos frutos, entre muchos otros, es la Renovación Carismática Católica, cuyo carisma central es la experiencia de la efusión del Espíritu Santo y que este mes de julio celebra 50 años de existencia.
Los artículos que presentamos este mes hablan de la transformación interna que produce el Espíritu Santo y de la necesidad de que los fieles estemos dispuestos a abrir la puerta de nuestro corazón para recibir la gracia de la transformación, que nos puede llevar a un nuevo y mayor grado de gloria desde ahora mismo.
Como en junio también se celebra el Sagrado Corazón de Jesús, incluimos un artículo muy interesante sobre los milagros eucarísticos, a fin de explicar su realidad y aclarar dudas.
También incluimos un artículo sobre las violentas persecuciones que están sufriendo nuestros hermanos cristianos en Siria, para que oremos por la paz en el Medio Oriente y por la protección de los cristianos, especialmente en Siria.
Oremos, también, para que se produzca un nuevo derramamiento del Espíritu Santo sobre todos los cristianos de todo el mundo y renueve la fe, el amor y la alegría en la Iglesia del Señor.
Paz y bendiciones,
Luis Quezada, Director Editorial | .(JavaScript must be enabled to view this email address)
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