Año de la Vida Consagrada
El Cardenal Prefecto de la Congregación para la Vida Consagrada y el Secretario General de la misma, explicaron que esta celebración especial durante el año 2015 ha estado pensada en el contexto del 50 aniversario de la publicación del Decreto Perfectae Caritatis del Concilio Vaticano II, e indicaban los siguientes objetivos de este año dedicado a la vida consagrada:
1. Dar gracias a Dios por el don de la vida consagrada y especialmente por los 50 años de renovación de la misma según las enseñanzas del Concilio.
2. Abrazar el futuro con esperanza, confiados en el Señor, al cual los consagrados ofrecen toda su vida.
3. Vivir el presente con pasión, evangelizando la propia vocación y testimoniando al mundo la belleza del seguimiento de Cristo, en las múltiples formas en las cuales se expresa la vida consagrada.
“La vida consagrada está en el corazón mismo de la Iglesia como elemento decisivo para su misión, ya que ‘indica la naturaleza íntima de la vocación cristiana’ y la aspiración de toda la Iglesia Esposa hacia la unión con el único Esposo”. (Vita Consecrata 3)
“Las personas consagradas son signo de Dios en los diversos ambientes de vida, son levadura para el crecimiento de una sociedad más justa y fraterna, son profecía del compartir con los pequeños y los pobres. La vida consagrada, así entendida y vivida, se presenta a nosotros como realmente es: un don de Dios, un don de Dios a la Iglesia, un don de Dios a su pueblo. Cada persona consagrada es un don para el pueblo de Dios en camino.” (Papa Francisco)
Comentarios