Queridos hermanos: Aunque la gran mayoría de los católicos no recordamos el día de nuestro Bautismo, pues fuimos bautizados cuando éramos bebés, ese acontecimiento marcó nuestra vida para siempre como cristianos católicos, pertenecientes a Cristo Jesús y miembros de su Cuerpo Místico. ¡Gracias a nuestros padres o aquellos que nos llevaron a bautizar! Ver más »

Cada domingo en la santa Misa, cuando rezamos el Credo, declaramos al unísono: “Confieso que hay un solo Bautismo para el perdón de los pecados,” pero, durante la temporada de Pascua, hacemos la profesión del Bautismo de una manera especialmente significativa: somos rociados con agua bendita. Ver más »

Piensa, querido lector, en todas las increíbles verdades que emanan del Sacramento del Bautismo: hemos muerto con Cristo; se nos ha borrado el pecado original; nos convertimos en hijos de Dios y fuimos incorporados como miembros de la Iglesia. Ver más »

Cuando yo era niña, mis padres tenían dos ideas muy distintas de la fe católica. Mi papá rara vez iba a la iglesia y a veces se burlaba de las personas que le pedían ayuda a Dios para tomar decisiones. Ver más »